¡No te lo pierdas! Así vive López Obrador en Los Pinos

A los ciudadanos nos puede demasiadas veces el morbo. Ese vocablo tan particular para camuflar el que de verdad queremos utilizar. Esa curiosidad levemente envidiosa que nos ayuda a soportar el no ser quienes queremos ser. Fuere como fuera, ¿alguna vez te has preguntado cómo vive el Presidente de México en Los Pinos? Hoy te hablamos del día a día de López Obrador.

El secreto de López Obrador se destapó el 1 de diciembre

Así vive Lopez Obrador en Los Pinos

Esta fue la fecha en al que Los Pinos abrieron las puertas por primera vez al público general. Una situación que a quien más sorprendió fue, sin ninguna duda, a los encargados de la seguridad. Jamás hubieran imaginado que tal marabunta de personas hubiera querido conocer qué se respiraba dentro de aquel lugar.

La verdad es que es una experiencia que a cualquiera le gustaría conocer. La curiosidad siempre mueve los pasos de los seres humanos. Por eso mismo nosotros también nos hemos acercado al lugar. La sorpresa fue bastante grande, en realidad.

El lujo se encontraba ligeramente borrado. la realidad es que el factor de encontrarnos en pleno cambio de figuras políticas ha hecho que la decoración no se mostrara como esperábamos, aunque esas famosas cortinas de precio tan elevado sí que descansaban delante de las ventanas.

Si nos tuviéramos que quedar con algo, lo haríamos con las muestra de arte que vestían las paredes. Obras de Miguel Hernández, David Alfaro o Ernesto Leaza.

¿Qué autos tiene el Presidente López Obrador?

Los pinos, la casa de Obrador López

Una de las cuestiones que nos generaba más intriga era qué autos tendría López Obrador en su garaje. Eran cinco, aunque solo pudimos identificar dos de ellos. Un Miguel Alemán y un Vicente Tax. Gusto no le falta al señor Presidente.

¿Te gustaría vivir como un Presidente?

Si la respuesta es afirmativa, te recomendamos que utilices nuestro buscador para encontrar tu futura casa. No podemos ofrecerte la del Presidente porque, entre otras cosas, tendríamos que haber ganado primero unas elecciones para poder vivir en el lugar que lleva acogiendo el símbolo de la democracia desde hace casi ochenta y cinco años.

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