¿Te imaginas que pagas miles de dólares más por tu vivienda cuando podrías haberlos ahorrado e invertido en un viaje alrededor del mundo?
Pues aunque te parezca mentira, millones de personas en todo el mundo pagan mucho más del precio medio por su propiedad.
¿El problema? ¡Que carecen de la calma necesaria para negociar y se ponen nerviosos en cuanto tienen una oportunidad delante!
Prefieren pagar y si te he visto no me acuerdo, en lugar de regatear con el vendedor en un baile que merezca la pena ver desde fuera.
Cómo negociar el precio de tu propiedad
¿Estás preparado para sumarte a esta danza?
En ese caso, acompáñame a través de estas 7 técnicas que te ayudarán a multiplicar tus oportunidades de ahorrar mucho dinero.
Está en tus manos pagar de más o de menos por tu propiedad:
- Escoge a un particular.
- Reduce el número de visitas.
- Estudia el mercado.
- Cuenta con otra opción.
- Busca desperfectos.
- Demuestra que vas en serio.
- Juega con el factor psicológico.
A que todo esto promete, ¿verdad?
Si sigues leyendo estarás mucho más cerca de ahorrar en la compra de tu próxima propiedad.
Te arrepentirás cuando te percates de que has pagado de más…
Escoge a un particular
Si puedes elegir entre negociar con un agente o con el dueño de la propiedad, elige siempre al segundo.
Este tendrá mucha más prisa en vender que una empresa y desconocerá la mayoría de los pormenores del sector.
Tener una propiedad en venta es un rollo y querrá dedicar su tiempo a lo que de verdad le motive antes de que salga el sol.
Además, tendrá un carácter con el que será mucho más fácil negociar, llegar a acuerdos y ser flexible.
Reduce el número de visitas
Por supuesto que debes visitar la propiedad antes de comprarla. ¡Esto lo sabe todo el mundo!
Sin embargo, jamás debes acudir tantas veces que el propietario se percate de que te has enamorado perdidamente de ella.
¿No te das cuenta de que cuanto más desees una propiedad más te pedirán por ella?
Pues es así, amigo. Al final la plata tira mucho más que las emociones.
Esto es como una partida de poker. Es importante que guardes tus emociones para ti y que sepas jugar las cartas a tu favor.
Estudia el mercado
Antes de tomar una decisión, percátate de que se encuentra a precio de mercado.
¡Imagínate que estás pagando mucho más de lo que debieras!
Después saldrás a la calle y se te quedará cara de tonto.
La información es poder y es mejor conocer a cuánto se vende en esa zona antes de comprar al primer postor.
¿Cómo?
Con portales inmobiliarios como icasas, en los que podrás encontrar el precio medio de cada zona.
Cuenta con otra opción
Siempre es bueno contar con un as bajo la manga, aunque tu corazón no palpite de la misma manera que con la que estás viendo en ese momento.
¿Por qué?
Porque si el comprador se hace el remolón, tú le podrás decir que estás valorando otras alternativas y que si prefiere no vender, no ocurre nada.
¡Seguro que ahí le entran las prisas!
Busca los desperfectos
Tienes que ser más listo que el hambre a la hora de negociar y tu ojo de halcón debe entrar en juego.
Activa el sensor que capta cualquier daño que entre en tu campo de visión.
Los desperfectos pueden ser usados como un arma arrojadiza para lograr esa rebaja tan ansiada. En serio, no son tonterías.
¿Acaso quieres que te ofrezcan una cocina con la vitrocerámica defectuosa? ¿Deseas unas puertas desportilladas para la entrada de casa?
Todos estos deterioros suman para conseguir rebajas.
Demuestra que vas en serio
Si llegáis a una especie de acuerdo, ofrécele un depósito para que se percate de que estás jugando en serio.
Es la manera de que comprenda que tus intenciones son firmes y de que estás dispuesto a pagar la cantidad que habéis acordado.
Eso sí, aquí pocos faroles, no te vayas a dar el golpe con tu allin.
Juega con el factor psicológico
Sería el broche final tras una ardua negociación.
Debes sonar convincente cuando le cuentas al vendedor que eres el candidato ideal.
Prueba tu solvencia, demuestra que en tu banco ya han dado por buena tu solicitud hipotecaria, deposita la fianza…
El propietario verá en ti a una persona de confianza, digna de merecer la casa que ha puesta a la venta.
¿Estás buscando un nuevo hogar?
Te animo a que te pases por el portal de icasas y filtres entre las diferentes opciones para encontrar aquella que haga palpitar tu corazón con mucha fuerza.
Dicen que encontrar un nuevo hogar es mucho de intuición, así que déjate guiar por tus emociones por esta ocasión.